UN PASEO POR LA RAMBLA DE POCITOS (segunda parte)

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 Les presentamos la segunda entrega de «Un paseo por la Rambla de Pocitos».

 LES RECORDAMOS HACER CLICK EN LAS FOTOS PARA AMPLIARLAS Y VER MEJOR LOS DETALLES QUE SE MENCIONAN.

Las ciclovías

Habilitar vías para andar en bicicleta  agrega mucho al bienestar ciudadano. Toda ciudad que se precie de “progre” o “eco friendly” debe tener su ciclovía, y en ese sentido Montevideo ha querido estar a tono. Por eso en la Rambla se ha construido una ciclovía que va desde Punta Trouville hasta  donde comienza Playa Ramírez. Sin duda una buena idea. Pero a veces no alcanza con hacer las cosas  solamente para poner un tilde de “tarea cumplida” en una hoja de papel.  Hay, además que hacerlas bien.   Y la ciclovía de la Rambla no está totalmente bien diseñada; de hecho tiene inconsistencias, algunas de ellas bastante absurdas.

Para empezar, teniendo más de 20 km. de Rambla, uno se pregunta cuál es el motivo por el cual la ciclovía tiene una extensión de poco más de 3 km.  3 km. , para aquellos a los que les gusta andar en bicicleta como deporte o diversión no es mucho,  se termina en seguida, y para los que lo usan como medio de transporte es algo bastante inútil. ¿qué se supone que debe hacer el ciclista en los trechos donde no hay ciclovía? ¿ir por la calle, arriesgando ser pisado por un auto?, ¿ir por la vereda esquivando gente?, ¿bajarse del vehículo y llevarlo a su lado caminando?. Complementariamente ¿le está permitido a un ciclista circular por la vereda donde no hay ciclovía? Lamentablemente es tal la improvisación y falta de cultura urbanística que los montevideanos desconocemos totalmente la reglamentación al respecto (si es que la hay).

Unafoto 1 ciclovía debe estar visible y claramente señalizada, y no con  minúsculos y espaciados dibujitos de ciclista  que el tiempo va destiñendo lentamente (foto 1) Pensemos que las personas que no son del lugar (turistas, por ejemplo) no tienen por qué saber  la función que cumplen esas sendas asfaltadas si no están claramente señalizadas .

El tránsito de los ciclistas no puede estorbar o interferir con el espacio destinado a los peatones. Tiene que tener su lugar propio. En ese sentido, para que las ciclovías no molesten, lo ideal es hacerlas pegadas  a la calzada, incluso “robándole” parte a ella y, si es posible, con algún canterito que delimite mejor la vía y que proteja, de paso, a los ciclistas de los transeúntes que – ya sea por poco respetuosos o porque ignoran que es un espacio destinado a bicicletas dada la mala señalización – tiendan a invadirla. Lo que no puede pasar es que los peatones que FormatFactoryIMG_3895caminan normalmente tengan que “cruzarla”, como ocurre a la altura de la calle Terú, como muestra la foto 2.  Tomando como referencia una persona que viene en sentido de Pocitos al Centro, antes de llegar a la palmera ,  la ciclovía está a su derecha. Al llegar a las canchas de tenis del club Nautilus la senda peatonal se interrumpe y continúa del otro lado de la vereda, pero la ciclovía continúa en línea recta, por lo que queda ahora a la izquierda. Como consecuencia, una persona que viene caminando normalmente, al llegar a ese punto tiene que “cruzar” la senda para ciclistas,  debiendo para ello tomar los mismos cuidados que si cruzara una calle con autos, lo cual no deja de ser una absurda incomodidad para un peatón. Esto se podría haber solucionado muy fácil si al llegar a las canchas de tenis le hubieran hecho a la ciclovía un pequeño desvío, para que pasara delante de la palmera y siguiera por el costado derecho, pegado a la calzada. En estas circunstancias el peatón seguiría su camino sin tener que pasar por la incomodidad de atravesarla.

Por otra parte, una ciclovía debe facilitarle el tránsito a los cicl20150204_084344istas, permitiendo continuidad y fluidez en su traslado. Para eso está hecha. Para ello – y esto parece obvio pero en la práctica parece que no lo es tanto – debe  tener una extensión adecuada en todo su trayecto y no tener obstáculos. Pues bien, cuando está llegando a la zona de las pescaderías, (foto 3)  se topa contra el muro de éstas y se angosta, no permitiendo prácticamente el paso. Más absurdo aún es lo que ocurre cerca de Punta Carretas. A alguna mente brillante que pagamos con FormatFactoryIMG_3865nuestros impuestos se le ocurrió plantar dos columnas de alumbrado sobre la ciclovía (o hacerla pasar  por donde están las columnas, no sé cuál fue hecha primero). Sin comentarios …(foto 4)

Y qué dicen de esta curiosidad?  La ciclovía que da vuelta a la palmera. Antes de la entrada que va para el faro de  Punta Carretas la senda para ciclistas viene por el lado 20150403_082223interior de la vereda, (a la izquierda de nuestro peatón que va hacia el Centro) hasta que deja de estar asfaltada y es continuada por una senda de pedregullo ¡con un árbol en el medio!!. (foto 5 y 6) Al  cruzar la calle que sirve de entrada hacia el Faro de Punta Carretas vuelve, inexplicablemente,  al lado exterior de la vereda, pegada la calzada, pese a que tiene espacio para seguir por la parte interior.  Luego, hace un insólito rodeo en torno a las palmeras (foto 7) para volver a retomar la senda interior, de la que absurdamente se había apartado.  En el lugar donde da la vueltita, la senda para ciclistas se bifurca en dos, como si el que la diseñó no tuviera muy claro por dónde seguir,  y ocupa toda la vereda, por lo cuál el peatón no sabe realmente por dónde debe ir.FormatFactoryIMG_386620150204_084224

Más adelante la senda cambia; parece diseñada por otras personas. Continúa del lado interior de la vereda, pero ahora protegida por un muro. Incluso cambia la señalización, que aquí es mucho más clara.

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A la altura del Monumento que recuerda el Holocausto del Pueblo Judío  sufre otra transformación: cambia el asfalto por el granito y desaparece toda señalización (fotos 9 y 10). Nos enteramos que la ciclovía sigue, por la existencia de unos pequeños mojones sobre el piso,  que no están en todo su trayecto, sea porque fueron arrancados o porque nunca fueron puestos. (en algunos puntos se pueden ver los restos de los mojones)

Y en el final, una nueva muestra de torpeza y de falta de respeto al peatón: la senda es trazada pegada al murito que 20150610_083623normalmente usa la gente para sentarse, generándose nuevos problemas. Por ejemplo, si alguien se quiere sentar va a tener que recoger sus pies, o, imaginemos,  la clásica imagen dominguera de la familia con los niños chicos. Mientras los padres se sientan en el murito de la Rambla a tomar mate con bizcochos dejan, bajo su mirada atenta, a sus niños jugar con sus booggies o triciclos en la vereda al lado de ellos. Si pegado al muro hay una vía por donde pasan ciclistas a toda velocidad será realmente un peligro hacerlo, por lo cual esta actividad ya no se va a poder hacer más.

Todas estas irregularidades, sumadas a la poca cultura urbana de nuestros ciudadanos,  provocan que la circulación de bicicletas por la Rambla sea lo más parecido a un caos. Si no llega a esa categoría es porque no es realmente mucha la gente que utiliza este medio de transporte. Los peatones caminan por el lugar de las bicicletas, los ciclistas por el lugar de los peatones haciendo “finitos”, y no hay nadie que controle nada.  20150206_084742FormatFactory20150204_084148

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Es que peatones y ciclistas no deberían compartir el mismo espacio.

000000 rambla rio de janeiroAquí en la foto 11 hay un ejemplo de una ciclovía bien hecha: entre la acera y la calzada, con dos sendas bien marcadas y con unas bicicletas bien grandes dibujadas para que nadie le quede dudas de lo que se trata. Es en Río de Janeiro. Y a ningún ciclista se le ocurre ir por la vereda.

 

 

 

Y éste es un ejemplo de una ciclovía molesta. En una calle céntrica de Bogotá, en el medio de la vereda. Aunque mejor señalizada que en nuestra Rambla ocupa demasiado espacio de vereda, y en cualquier descuido el peatón corre el riesgo de que lo lleven puesto.

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Los clubes de pesca

 

A la altura de Punta Carretas, detrás del Golf y antes de la Playa Ramírez hay un extenso espacio con hermosas vistas, ocupado por una serie de clubes de pesca (El Morrito, Noa Noa, Atlanta, Ramírez, Armonía, Club 20150610_084404de Pescadores de Montevideo).  20150129_082941

Desde allí, se puede apreciar toda la zona Sur de la bahía,, desde Ramírez hasta la Escollera Sarandí con toda su silueta de edificios. De noche el espectáculo es especialmente hermoso, con el edificio sede del Mercosur (el viejo Parque Hotel) 20150609_081058restaurado de un blanco impecable y completamente iluminado. Si alguna vez tienen ocasión de estar en uno de estos lugares podrán comprobar lo que les digo. La pregunta qué sigue es por qué están estos clubes aquí, en medio de un lugar que debería ser público. O mejor dicho, ¿a cambio de qué están esos clubes de pesca instalados?. ¿es algo de utilidad pública la existencia de dichos clubes como para haberles concedido una zona tan privilegiada? La verdad que no lo parece, no parece haber demasiados motivos válidos como para que los montevideanos le cedan a un puñado de personas el derecho de ubicarse en esta zona y construir sedes donde reunirse a hacer comidas, mirar el IMG_5006paisaje y salir de pesca. No me parece mal que existan emprendimientos privados en lugares públicos siempre y cuando el aprovechamiento que hacen del lugar se vuelque en beneficios a la comunidad que guarden una proporción razonable con el valor de lo que el Estado les está cediendo, beneficio que se puede materializar en el pago de un alquiler suculento, realización de obras sociales, embellecimiento de la zona o generando un interés turístico. Y por sobre todas las cosas debe ser concedido mediante algún procedimiento licitatorio que dé a todos los ciudadanos las mismas posibilidades de usufructuar el lugar.

Nada de esto parece ser el caso. Más bien el lugar se destina simplemente para el esparcimiento de la gente del club. Y si bien se supone que los clubes no tienen fines de lucro también suelen alquilar los lugares para casamientos, despedidas y eventos varios e incluso hay instalado un Resto-bar.  Por lo que se puede saber, de acuerdo a algunos carteles que lucen en el lugar, los 20150610_083604emprendimientos fueron concedidos, vaya a saber por qué motivos y con qué argumentos y medios, en la década de los 40 y luego los permisos se han ido renovando. Me imagino que no debe ser fácil sacar a estos clubes de ahí, probablemente funcione la teoría del hecho consumado y los  derechos adquiridos y para hacerlo puede ser necesario emprender largos y engorrosos procesos, corriéndose el riesgo, además, que durante un tiempo la zona quede abandonada y a merced de okupas.

Seguramente, por ese motivo, durante la segunda administración Arana, la Intendencia transó con ellos y logró sacarles una tibia contraprestación, que por lo que se ve, da la impresión que no se ha preocupado en controlar si se cumplía adecuadamente.

Así nació “El Paseo de los Pescadores”. Dadas las probables dificultades para sacar a estos clubes de ahí, la idea, en principio, es buena.  Los clubes financian la construcción y mantenimiento de dicho paseo.  (http://www.lr21.com.uy/comunidad/53764-inauguraron-ayer-la-segunda-etapa-del-paseo-de-los-pescadores). De esta manera la comunidad recupera algo del acceso a este espacio público, pasando a contar los ciudadanos con una extensión de la Rambla para poder pasear bien cerca del mar. Antes no tenían acceso a esa parte, ya que directamente pertenecía a los clubes.  Para los clubes es un gran negocio, a cambio de poco dinero y la mínima molestia de ver a la gente paseando delante de sus locales, se aseguran la permanencia en el lugar. Todos contentos, entonces.

Bueno, no tanto. Si bien la idea es buena   y la vista del lugar inmejorable el emprendimiento adolece de algo que es bien típico de este tipo de concesiones con “contraprestación”:  normalmente se logra que los favorecidos por la concesión hagan la obra, pero luego se pierde todo interés en el mantenimiento (por parte de quien debe mantenerlo y por parte de quiénes deben fiscalizar que el acuerdo se cumpla).

En esta serie de fotos que se muestran a continuación se puede apreciar el estado de deterioro que tiene este paseo, que podría realmente ser muy hermoso:

La entrada está marcada por un ancla despintada y un cartel torcido que nos anuncia que ahí comienza el Paseo de los Pescadores20150129_08361720150129_083020.

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El piso está lleno de grietas y la pintura totalmente descascarada

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El descuido también alcanza a los muros que  rodean el camino:  20150129_08371520150129_083626

 

 

 

 

 

 

 

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Y aquí hay algunas particularidades que son realmente bastante difíciles de entender. ¿Cuál es el sentido de generar esta subidita y bajada? ¿Entorpecer la circulación de las personas que presentan alguna dificultad en su movilidad?

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Esto es todavía peor: a lo largo del recorrido han instalado estas barandas de hierro que han sido incluidas, seguramente, con la fina20150129_083745lidad de impedir que la gente se largue en 20150129_08371920150403_084654bicicleta y a toda velocidad por la zona. Si ese es el motivo hubiera bastado con poner un cartel por el cuál se prohibía el ingreso con bicicletas y establecer una mínima vigilancia. Pero lo que han logrado es generar discriminación: imaginemos por ejemplo una persona que debe ser desplazada en silla de ruedas. ¿Cómo hace para pasar por ahí?. Imposible.  Y un bebé que es llevado en cochecito? Complicado para el que lo lleva.

Sobre el final del paseo instalaron unos juegos infantiles. Y como es común en este  rubro predomina la desidia y falta de mantenimiento; subibajas sin asientos, hamacas a las que le faltan pedazos  o simplemente  falta la propia hamaca porque han cortado la varilla de metal y nadie se ha preocupado de reponerla.

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Sin duda todo este descuido contrasta con el cuidado que tienen los propios locales de los clubes: hermosas y prolijas construcciones, pasto bien cortado, y uno de los pocos lugares con muchos árboles de la zona.

 

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En la tercera y última parte hablaremos de la zona de la playa, las pescaderías artesanales y los monumentos.

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Un paseo por la Rambla de Pocitos (tercera parte) https://salmonbizarro.wordpress.com/2015/08/09/un-paseo-por-la-rambla-de-pocitos-tercera-parte/

Un comentario »

  1. Salmón:

    Me enorgullece saber que hay blogs de nivel intelectual superlativo como el suyo en nuestro país. Por su puesto, no estoy en todo de acuerdo con sus posturas, pero de eso se trata.

    Lo invito a ojear mi nuevo semanario online, que hago junto con otros compañeros. Intenta tener un elevado nivel también, aunque no es tan profundo como su blog. Creo que le gustará. Le comparto la dirección: semanariohonesto.blogspot.com

    Un atento saludo,

    B.A

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  2. I read the news today, oh, boy
    Four thousand holes in Blackburn, Lancashire
    And though the holes were rather small
    They had to count them all
    Now they know how many holes it takes to fill the Albert Hall
    I’d love to turn you on

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  3. Pero que auriculares más grandes que tienes!

    Veo que aquí tocó el tema ciclovías… bien. salud.

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